Una alternativa clásica, diferente y apetitosa a la pasta común, elaborada a partir de patatas selectas y harina de trigo tierno. El equilibrio justo entre ambos ingredientes hace que sean compactos pero suaves y cremosos, aterciopelados en el paladar y a la vez consistentes para facilitar una rápida cocción homogénea. En Italia los gnocchi suelen comerse todos los jueves, variando la salsa con la que se acompañan: con boloñesa o pesto a la genovesa, con cremas suaves de queso, mantequilla fundida con salvia y parmesano, a la toscana con espinacas y ricotta o en una preparación elegante y sibarita con salsa de trufa.